"Me alegraba de no estar enamorado, de no ser feliz con el mundo. Me gustaba estar en desacuerdo con todo. La gente enamorada a menudo se ponia cortante. Perdian su sentido de la perspectiva. Perdian su sentido del humor. Se ponían nerviosos, psicoticos, aburridos. Incluso se conventían en asesinos."
Charles Bukowski